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La clave para invertir en oro físico es la fiscalidad

Invertir en oro
Invertir en oro

La clave para invertir en oro físico es la fiscalidad. Puedes hacerlo a través de  joyas o en lingotes y monedas, pero resulta más rentable mediante estas dos últimas.

Ahora que empieza a repuntar la inflación, algunos ahorradores deciden poner una parte de su dinero en oro físico. Esta inversión pueden hacerla comprando bien joyas, bien lingotes y monedas. Sin embargo, desde la perspectiva de la fiscalidad, resulta mucho más rentable comprar oro físico a través de lingotes y monedas. Te lo explicamos.

Como dato, durante los primeros tres meses de 2021, la demanda de joyas fue de 477 toneladas (un 58,5% sobre un total de 815,7 toneladas) y la demanda de lingotes y monedas de oro, de 339,5 (un 41,6%), según el Consejo Mundial del Oro. Por lo tanto, son los productos basados en oro físico que más demanda tienen.

Lingotes y monedas como oro físico de inversión

Sin embargo, conviene que sepas que en la Unión Europea el oro físico de inversión goza de una fiscalidad especial. Esta particularidad exime a los inversores en lingotes o monedas del pago del IVA si adquieren piezas de 2 gramos o más que cumplan las características detalladas en el punto anterior.

En el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) los beneficios obtenidos por el oro se incorporan como ganancia patrimonial. Cuando se produce la venta, el oro tributa por la diferencia entre el precio de compra y el de venta. Y, en el caso de beneficio en la operación, pagas por el incremento patrimonial correspondiente en la base del ahorro.

Además, si se reside en una comunidad en la que hay que hacer declaración del Patrimonio, se declara igual que el resto de bienes e inversiones.

Las joyas tienen peor fiscalidad porque pagan IVA

Las joyas, por su parte, no tienen la consideración de oro físico de inversión por la legislación europea. Así, cuando se adquieren se paga el 21% de IVA, al igual que en las transacciones de cualquier producto no bonificado.

Por lo tanto, la clave para invertir en oro físico es la fiscalidad. Adquiere lingotes o monedas mejor que joyas.